sábado, 7 de febrero de 2009

El monedazo



El contexto es el siguiente: Temporada 1982-83. Se juega la quinta jornada de la liguilla de la Copa de Europa en la antigua ciudad deportiva del Real Madrid y quedan solo 2:32 minutos para el final. El Madrid gana de cuatro, le pitan la quinta al ya por entonces prehistórico Rullán y los del Maccabi se lían a protestar al árbitro por una canasta. De pronto un espectador, afectado por algún extraño tipo de impulso suicida, le lanza una moneda a Earl Willimas y se desata el apocalipsis. Williams era un negrazo enorme, con manos como yunques y pinta de comer bebes en los tiempos muertos. Obviamente no se iba a quedar quieto. Así que para regocijo de los espectadores saltó la valla para ir a saludar al intrepido lanzador. Es descacharrante recordar como el resto del pabellón se desgajó como una naranja para no impedir el contacto entre el norteamericano y su presa. Gracias a Dios el otro americano del Maccabi, Perry, saltó detrás y consiguió reducirle con una extraña maniobra que le devolvió a la pista de una voltereta. Que nadie haya conseguido entrevistar nunca al espectador es delito.

Extras: Entrevista en As a Earl Williams.

6 comentarios:

Álvaro Martínez @alvarom dijo...

No conocía la historia. Gran documento, incluida la entrevista extra.

imaginauta dijo...

Un mito de mi niñez. La pareja Willimas-Perry es una de las mejores de los años 80. Con la cantidad de equipos que hay hoy en día no creo que hubiesen jugado en Europa. Hay alguna anécdota más de la época que considero jugosa y ya postearé.

Mo Sweat dijo...

Ja, ja, ja, ja, interesante documento gráfico.
La verdad es que en estos casos yo me suelo poner en el lado de Earl Williams, ya que yo soy de los que condeno especialmente este tipo de cosas por parte del público.
Siempre he dicho que la mayoría de gente que pierde la compostura y hace este tipo de cosas suelen ser los típicos amargados que cuando llegan a casa su mujer les pega y cuando van a ver un partido se liberan y hacen este tipo de cosas, porque se creen con derecho y se sienten protegidos por la multitud y la organización.
Es cierto que tampoco se debe saltar a liarte con el público, pero condeno mucho más lo que hizo el espectador.

imaginauta dijo...

Hubo una época en que este nivel de violencia era tristemente habitual. En el historial de artículos de acb.com tenéis el testimonio de un periodista que vivió una final de Liga de principios de los 80 con los aficionados radicales del Barcelona. Bastante jodido el tema. Creo que se titula "Yo viví una final con los morenos" o similar.

Matías Castañon dijo...

Grandioso video: siempre había oído hablar del famoso "monedazo" (no hubo periodista madrileño que no lo recordara tras el "Aubernica" entre Pistons y Pacers), de Earl Williams saltando la valla pero jamás había visto las imágenes. Lo de los monedas fue una constante en los ochenta: no hay mas que recordar las visitas a campos griegos de algún que otro equipo español, como cada uno se iba equipo se iba por un tunel (no sea que le dieran a uno de los suyos) y como sabían que, cuando se iba la luz, había que ponerse a cubierto. Si tenéis por ahí el especial del número 1000 de Gigantes hay una nota (creo que es de Emilio Cobos... si no es de él, es de Carlos Candel) hablando de como eran esas "lluvias de dracmas".

imaginauta dijo...

En Grecia te tiraban de todo. Las monedas son lo de menos. A veces, cuando se les acababa el cambio, arrancaban las sillas y te las tiraban también, y una vez recuerdo que se llegó a lanzar hasta un cuchillo jamonero. Espectacular.