martes, 11 de noviembre de 2008

EN EL PAIS DE LOS SUEÑOS... ROTOS.



Shaun Livingston es un jugador que, a simple vista, llama la atención: Base, poseedor en sus días de un espectacular peinado afro y de 2'01 metros de estatura, parecía estar tocado por la varita de la genialidad. Había debutado en la NBA con 19 años y su progresión auguraba todo lo bueno que se podía esperar de un jugador con unas características extraordinarias, con el único punto negro de sus exiguos 84 kilos de peso para tanta altura...


Y entonces, llego el “crack”.


Rodilla dislocada, triple rotura de ligamentos, fractura de rotula...el diagnostico, incluso para una persona que no se dedicase al deporte profesional, era lapidario: articulación inutilizada durante un largo período, y solo rehabilitable tras un largo y costosísimo tratamiento. Y aun así, las dudas de que con el tiempo volviese a estar en las mismas condiciones que antes de la lesión son mas que fundadas, y de hecho así lo entendió su equipo Los Angeles Clippers, dejándolo libre este mismo año.


El bueno de Shaun vio como sus ilusiones, centradas únicamente en el baloncesto (recordemos que nuestro protagonista dejo la universidad siendo un “freshman” en su primer año) se truncaban de la forma mas violenta. Pero no es el único caso en una época en que jugadores dan el salto cada vez mas jóvenes a las ligas profesionales, con mayor o menor fortuna. Estudios? Otras alternativas? “¡Pero si yo voy a ser el próximo (Añada aquí el nombre del jugador mas rimbombante que le venga a la cabeza, astuto lector)!!!”


Muchos son los casos de jugadores que, sencillamente, no saben hacer otra cosa que botar la pelota y lanzarla a canasta. Es difícil renunciar a un sueño al que has dedicado toda una vida, una promesa de vida millonaria y cómoda y en la que, en muchos casos, es la única salida que muchos jóvenes de extracción social baja vislumbran para con su futuro.


Algunos reencuentran su camino cuando ya ven que nunca volverán a ser los mismos, muchas veces como comentaristas deportivos o similar, como en el caso de Jay Williams (nunca ha habido mayor justificante que la prohibición de subirse en moto que la historia este muchacho.) Otros optan por ligas de nivel físico menos exigente, como los circuitos europeos; Encontramos aquí ejemplos tales como el pivot Shaun Vandiver, poseedor de uno de los mejores juegos de pies que servidor ha visto en su vida a pesar de estar prácticamente cojo, o el escolta LaBradford Smith, una estrella universitaria al que las lesiones obligaron a recalar en León en los años 90. Y otros muchos pasan por un proceso similar a algunos jugadores de la NBA retirados, que después de dedicarle toda una vida a la pelota no saben que hacer con los años que les restan, pero eso es otra historia.


En definitiva, mucha suerte para Livingston y todos aquellos que se juegan su futuro a una sola carta, esperando que sea la buena...

2 comentarios:

Marcos Moreno dijo...

totalmente de acuerdo con lo lamentable de los medios de comunicación españoles afeándole la acción a Garnett y echándole en cara otras cuestiones que no venían al caso.

eso sí, es una ida de olla de campeonato.

imaginauta dijo...

@Noticias NBA Press

Hombre, muy habitual no es, pero no le agredió ni puso en peligro su integridad física. En todo caso son acciones que yo creo que debe ser el árbitro quien decida sobre la pista.

Para mi el que más "on fire" está en este inicio de temporada es Shaquille, con acciones de violencia realmente inusitada. Si el mamporro que da el otro día se lo suelta a Rudy veo al Marca contratando a dos sicarios. XD