jueves, 18 de octubre de 2012

La estrellita

Aquí tenemos un curioso ejemplar, que en categorías profesionales suele durar cuatro partidos. La estrellita comparte varias cosas con la estrella: tira mucho, tiene absoluta confianza en sus posibilidades, y normalmente meterá muchos puntos.

Si me hago el loco, quizá no saldre en Estadisticas y Bikinis....o no.

El hecho de que lo haga con porcentajes de acierto pauperrimos, no le importe absolutamente el numero de pelotas que pierda en el proceso (muchas) y que muestre una completa desdidia a la hora de defender (para que, si YO donde aporto es en ataque) hace que tengan un momento de gloria, engañen a un entrenador uno o dos años, y después una vez se le ha visto el plumero acabe viendo reducida su aportación hasta convertirse en poco tiempo en carne de banquillo. 

En categorías amateurs tales princesitas de cuento suelen tener una carrera bastante algida, en cuanto a que siempre es difícil encontrar buenos anotadores que no se dediquen a esto, para exasperación de compañeros. En esos casos, la formula es rodear a la estrellita de un buen numero de J.P., aunque esto suele acabar invariablemente en desastre al cansarse estos últimos de cubrirle el culo a un tipo que cree que caga rosas en vez de putrefacto excremento. 

En categorías profesionales se suelen encontrar más en NBA que en ACB, por aquello de que el juego de allí entroniza a los jugadores que dominan el uno contra uno, al menos por un tiempo. Actualmente el ídolo de esta cohorte es el señor Amare Stoudamire, jugador que ha conseguido cobrar más de 20 millones de dolares sin hacer un atisbo de defensa en su vida y de vivir engañando al público mediante la recepción de pases de un canadiense genial que, en su mejor época, hizo creer al mundo que Amare era algo más que una estrellita.

Desde aquí muchos animos a la carrera de Amare, aunque me temo que como no haga un año de relumbrón es carne de traspaso o de finiquito multimillonario. Todos te envidiamos, y siendo como eres una encarnación de los peores vicios del ego baloncestistico, lo tuyo tiene muchismo merito.

¿Excelsior...?


2 comentarios:

imaginauta dijo...

Este odio hacia Amare me solivianta. Amare tiene uno de los mejores nombres que ha tenido jamás una estrella de la NBA sin necesidad de hacerse un cambio cutre al estilo del pirado de Metta World Peace que directamente debió renominarse como Metta Dona. ¿Cuando empiezas a hablar de Laso que tenemos que aumentar la audiencia del blog?

Art0rius dijo...

Laso es un genio pre-histórico; Es un general que barrunta que para presentarse en batalla solo hace falta músculo y testosterona, por lo cual le amo profundamente. En breve, exaltación heróica de sus muchas virtudes.